De continuar con la exacerbada y prácticamente ilimitada protección de la propiedad privada que caracteriza el sistema neoliberal que sostiene la constitución actualmente vigente, la crisis climática se verá profundizada irremediablemente, mediante mecanismos institucionales que consideran al planeta como fuente ilimitada de recursos para beneficio de unos pocos y desconocen sus límites naturales.